sábado, 3 de enero de 2015

La mañana de Navidad

El 25 de diciembre, muy temprano despertó Princesa Descalza, y recordó que en Navidad habría regalos bajo el árbol. Despertó a su hermano mayor y juntos bajaron las escaleras. Es casi mágico acompañarlos en ese momento: McQueen tomó la delantera y sin siquiera observar que las botas navideñas señalaban qué regalos le correspondían a cada quien, dijo que la caja azul más grande era la suya y la pequeña era de Panbimbo. Ya desenvolviendo los regalos supo cuáles eran los suyos y cuáles de su hermanito. Las cajas para niña eran evidentes y en esas no hubo confusión.

Mi esposo les leyó un libro sobre el nacimiento de Jesús (que recibió McQueen como regalo de cumpleaños) y armaron las figuras que incluía:

Fuimos a Misa de niños y un señor me llamó la atención cuando estaba sola con Panbimbo, y simplemente le contesté que llevaba a mis hijos inquietos precisamente porque era la Misa especial para niños. ¡Qué gente!

1 comentario:

  1. Primera vez que los 3 gozan la Navidad. Entender que el nacimiento de Dios es un evento de lo más importante, es significativo para todos nosotros como católicos.

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